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© FEGLININ ISSN 2594-2298
| Año 8, No 29, abril – junio 2024 |
Volumen 1
aprendizaje, la contribución de la unidad de aprendizaje al perfil de egreso, la competencia
de la unidad de aprendizaje, las orientaciones pedagógico- didácticas, las secuencias
didácticas, los recursos de aprendizaje, el perfil y competencia del docente y los criterios de
evaluación de las competencias del docente.
En este marco, es fundamental el empleo de modelos pedagógicos adecuados para el diseño
de un programa de educación ambiental. Al respecto, Vergara y Cuentas (2015), señalan que
en el constructivismo los contenidos curriculares deben considerar las condiciones dadas por
la ciencia, el contexto, los estudiantes y el medio, por lo cual los contenidos a desarrollar
deben permitir la construcción del conocimiento a través de la interacción del participante
con el entorno, además enfatiza que se deben utilizar estrategias metodológicas que conduzca
el dialogo, el descubrimiento, la reflexión, el reconocimiento de errores y la capacidad de
generar conclusiones. Por otro Moreno (2012), enfatiza que en el modelo de competencias el
objetivo no consiste en aprender conocimientos disciplinares, por el contrario, se enfoca en
estrategias didácticas como la preparación del entorno de aprendizaje, centrarse en
situaciones reales para el desarrollo de competencias, la organización del tiempo y espacio
debe ser flexible y creativa en el cual el participante pueda experimentar.
Respecto a la programación, Diaz et al., (1981), argumentan que un programa de estudio
debe contener los datos correspondientes al curso, la asignatura o módulo, el contenido
temático organizado lógica y psicológicamente y clasificado en unidades temáticas, así como
la descripción de las actividades planeadas en la cual se debe incluir los métodos y medios
de instrucción, sus formas, los tipos de evaluación, los recursos necesarios como los
escenarios, materiales, elementos de apoyo, recursos humanos y los tiempos estimados
necesarios para las actividades del programa. De acuerdo a lo anterior, la programación
conlleva al diseño de una planeación o secuencia didáctica. En este sentido, Tobon et al.,
(2010), argumentan que la secuencia didáctica considera los siguientes elementos: situación
problema del contexto, competencias a formar, actividades concatenadas, un proceso
metacognitivo, evaluación y recursos de aprendizaje. Asimismo, señala que son conjuntos
articulados de actividades de aprendizaje y evaluación, en la cual intervine un docente.
También, señala que la secuencia didáctica se puede elaborar para una asignatura o módulo,
no obstante, sugiere que no se diseñe para solo una clase, sino que integre mínimo dos
sesiones de aprendizaje. Además, señala que la secuencia didáctica generalmente contiene
los siguientes aspectos: nombre de la asignatura o módulo, nombre del docente o docentes,
grupo o grupos a los que se dirige, fechas de la secuencia didáctica, así como el bloque o
bloques, temas o subtemas y unidades. Por su parte Bedolla et al., (2017), señalan que la
secuencia didáctica es un documento en donde se planean las actividades didáctico-
pedagógicos que se realizan en el proceso de aprendizaje en un periodo determinado,
asimismo, mencionan que las secuencias didácticas son actividades preestablecidas
orientadas por estrategias didácticas las cuales pueden ser puestas en marcha en los distintos
espacios y ambientes de aprendizaje, en estas se especifican las actividades de mediación del
docente y las que debe llevar a cabo el aprendiz. Además, señalan que la secuencia didáctica
debe contener un título, la identificación de la secuencia didáctica, el problema significativo
del contexto, la competencia de la unidad de aprendizaje, los elementos de competencia, el
eje integrador, la identificación de la sesión, las actividades de aprendizaje y la evaluación.
En relación con la evaluación Frade (2009), señala que la evaluación abarca el trabajo
realizado, los productos obtenidos, las actitudes, lo que incluye una evaluación diagnostica,
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